q rico follan

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miércoles, 18 de mayo de 2011

Capítulo 19












Fernando sale de la cocina con una cerveza.
--¡¡tu madre es una pesada¡ ¡¡a ver si no viene tanto.¡ --dice con desprecio.
Fernando se tumba en el sofa. Jose le iba a contestar pero el pequeño Juliancito rompe a llorar. Con mucha rabia Fernando dile:
--¡¡haz que el bastardo se calle o lo ahogo¡
Jose no puede más. Lanza un jarrón a los pies de Fernando y le dice:
--¡¡no vuelvas a hablar así de mi hijo¡
Fernando se pone como loco.
--¡Ese bastardo no es nada tuyo, es el hijo de tu amante¡ ¡¡un pedazo de maricón como tú no podría tener un hijo¡
A Jose le duelen las palabras de su amado.
--¿porqué me hablas así? –dice triste—Yo adoro a ese bebe, quiero que sea nuestro hijo.
Fernando, ahora que sabe que Jose quiso al padre del bebé, detesta aún más a ese pequeño. Se muere de los celos. Estrella la lata de cerveza contra la pared. Muy agresivo se abalanza hacia Jose. Jose lo mira con miedo seguro que lo va a matar. Fernando lo agarra del cuello Es muy violento.
--¡¡me haces daño¡ --se queja Jose.
Fernando lo besa con una furia. Más que un beso de pasión parece un beso de ataque pero Jose acaba fundiéndose en los brazos de ese hombre que ha acabado con su voluntad. Lo mira enamorado mientras que su pequeño llora y llora. Fernando le da un empujón al joven. Lo mira molesto y le dice con desprecio:
--¡¡si me vuelves a gritar me voy y no me ves nunca mas¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Vivir sin él es lo que más miedo le da a Jose aunque vivir con él sea un infierno.
--lo siento perdóname, no lo volveré a hacer --dice Jose agachando la cabeza.
Fernando vuelve a tumbarse al sofa y con desprecio le dice:
--¡¡vete, cumple con tus obligaciones¡ ¡¡El bastardito te llama¡
Jose se muestra sumiso, tumbado en el sofá Fernando sonríe maliciosamente. Jose acuna a su hijo. Llora, le pide perdón por la situación en la que vive. Juliancito es lo único puro que tiene y sólo desea que la vida no le cobre en su hijo sus errores. Es lo único que no se podría perdonar.










Pese a todo, Jose siente que Fernando lo quiere. Almenos en la cama están los dos solos. En sus brazos mientras fornican se siente en el paraíso. Luego Fernando ya lo desprecia. Fernando se levanta totalmente desnudo. Jose lo mira con amor y con deseo.
--vuelve a la cama ¡necesito abrazarte¡
Fernando ni lo mira. Muy frio le dice:
--tengo trabajo.
Fernando saca un portátil de una bolsa. Jose se levanta envuelto en la sabana:
--¿te has comprado eso?
Fernando sonríe:
--si, es muy bueno ¿no?
--¡¡como gastas en esa tontería cuando tenemos tantos problemas económicos¡ --le reprocha Jose desesperado.
Fernando lo mira amenazante:
--¡¡para empezar me bajas el tonito¡
Jose se muestra sumiso. Fernando sonríe satisfecho:
--tenemos problemas de dinero porque tú quieres. Eres todo un bombocito, una putita por la que muchos viejos pagarían por tenerte.
--¡Eres un monstruo¡ ¿¿¡qué clase de hombre eres tú? ¿¿¡qué cosa me estás proponiendo? –Jose decepcionado.
Fernando de nuevo se muestra como víctima:
--¡¡pues si soy un monstruo por pensar en nuestro hijo lo soy¡¡tú lo adoptaste pero parece que no te importa¡
Hasta se finge lloroso:
--¡Yo busco trabajo desesperadamente pero no encuentro --con un dolor fingido-- ¡¡tú tienes la solución a los problemas y no haces nada.¡ ¡¡tu podrías ganar mucho dinero pero no, eres tan egoísta --con reproche-- que sólo piensas en ti. Tu hijo gasta mucho y con un sólo cliente a la semana no alcanza¡
--si tú no te quedaras la mitad no pasaría nada. ¿¿que haces con ese dinero? --le reclama Jose.
Fernando se pone como loco. Lo golpea con rabia.
--¡¡no seas malagradecido, que con todo lo que hago por ti no sé como tienes cara de reclamarme nada¡
Jose no puede creer que el hombre que ama sea tan cínico y antes que pueda reaccionar Fernando sigue atacándolo:
--¡¡además si fueras decente lo entendería pero tú siempre has sido una puta, te has metido en la cama de cualquiera¡ ¡¡pues que más te da cobrar¡ ¡¡es hacer lo mismo que has hecho toda tu vida pero cobrando¡
Jose lo mira lloroso y dolido por sus últimas palabras y Fernando sigue diciendo:
--¡¡no me mires así que la culpa es tuya¡¡¡coger es lo único que sabes hacer bien¡ ¡¡pues te guste o no tienes que hacerlo¡
Jose acaba sucumbiendo al amor que siente por él:
--podría estar con dos a la semana.
Fernando lo abraza, lo estrecha entre sus brazos. Ahora que al fin Jose se ha dejado convencer no pierde la ocasión. Muestra su mejor sonrisa. Fernando sonríe con cara de travieso y Jose se funde en sus brazos:
--te amo.
--pues demuéstramelo --dice Fernando con ese guiño de eso que a Jose lo convence siempre.
Jose lo ama está dispuesto a cualquier cosa por demostrarle que es suyo, que lo ama. Quiere obedecerlo aunque sea pasando por encima de su dignidad.
--tienes razón, necesitamos el dinero y ya no me viene de aquí. Lo dejo en tus manos. Me acostaré con quien tú me digas, las veces que tú digas. Tienes carta blanca. Haré lo que me digas.
Jose lo abraza con fuerza. Fernando lo acaricia:
--somos una familia. Has tomado la decisión correcta.
Jose siente que los brazos de ese hombre son un paraíso. A Fernando le brillan los ojos, sonríe maliciosamente. Se aparta de él.
--ponte guapo… Esta noche te traigo cuatro viejos que están locos por ti, pagarán lo que sea.
--¿¿cuatro?
Fernando sonríe pícaro.
--seguro que no es la primera vez que lo haces con tantos.
Jose no dice nada. Fernando lo deja solo.

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