q rico follan

q rico follan

viernes, 8 de julio de 2011

Capitulo 27 (y ultimo)





Jose ha vivido un sueño con Sergio. Ha sido un lapsus de tiempo en el que no ha visto a Fernando. Se despiden cerca de la casa con un apasionado beso. Jose no sabía que esa mañana Paula y Fernando volvían de su luna de miel. Fernando siente una punzada en el alma. No soporta ver a Jose feliz con otro. Paula goza con la situación. El matrimonio se acerca a la pareja.
--¡vaya, que sorpresa¡ -dice Paula.
A Jose se le hiela la sangre. Sergio lo tiene abrazado. Jose se gira. Sufre un fuerte impacto al ver a Fernando. Jose ve el odio en los ojos de Fernando y le asusta. Fernando no dice nada y eso es lo que más le asusta, el silencio de él. A Paula le encanta que Fernando se enoje con su hermano.
--no sabía que tenias novio –dice Paula con ironía.
Fernando la fulmina con la mirada.
--eso no es cierto, sólo es un amigo –dice Jose nervioso.
A Sergio le duele que lo niegue pero no dice nada porque se da cuenta de la tensión. Paula es la única que se lo pasa bien y enganchada del brazo de su marido y dice irónica:
--si eso haces con tus amigos…
Fernando mira a Jose con mucha dureza. Jose agacha la mirada porque es demasiado fuerte el rencor del hombre. Paula se presenta a Sergio.
--Yo soy la hermana de --con rin tintín-- tu amigo y este es mi esposo.
Sergio extiende la mano sonriente. Jose tiene mucho miedo de que Fernando diga una grosería pero no dice nada, Fernando y Sergio se estrechan la mano ante la mirada de nerviosa de Jose. La mirada de Fernando es muy dura. En ese momento es que dice brusco:
--y tus hijos?¿los has dejado solos?
Fernando deseaba que Sergio no lo supiera. Sergio se da cuenta que pasa algo.
--están con la abuela –Sergio.
Fernando está muy herido. Le duele mucho que Jose en su ausencia ya tenga otro hombre. Fernando clama venganza y Jose lo sabe y lo tiene muy preocupado pues no sabe por dónde le va a salir.
--¡¡no te he preguntado a ti¡ --Fernando violento.
Sergio no entiende nada. Jose intenta que su chico se vaya pero Sergio no quiere.
--¿¿que está pasando?
Sergio y Fernando se miran como rivales.
--¡¡pues si quieres saber lo que pasa yo te lo voy a contar¡ --Fernando con odio.
Paula se está divirtiendo mucho. Jose asustado le exige a Fernando que calle. Sergio quiere saber y con desprecio Fernando dice:
--¡¡pasa que mi cuñado nos salió puta, que le va abriendo el culo a todo el mundo y yo tengo miedo que pille sida o algo así. ¡¡así que a mi me toca defender el honor de la familia porque, con todos los machos que se lo han tirado, a este de honor no le queda¡
Jose agacha la cabeza humillado. No se atreve a mirar a Sergio. Paula disfruta divertida. Fernando escupe odio furioso.



Fernando mira a Jose con agresividad. Le quiere hacer sentir que es de su propiedad y que no piensa permitir que ningún hombre se le acerque. Jose no se atreve a mirar a los ojos a ninguno de los dos. Paula está disfrutando mucho la humillación de su esposo hacia Jose. Sergio no entiende como Jose permite que su cuñado le hable en esos términos. Le duele que no se defienda. Se pone frente a Fernando. Le da un pequeño empujón y le reclama:
--¿¿¡como hablas así??
Fernando quiere a Jose para él, que si se acuesta con otro sea para humillarlo no por gusto. Le devuelve el empujón a Sergio y con odio le dice:
--¡porque es verdad. Tú lo sabrás. Se tira a todos en la primera cita¡¡ ¡¡se ha tirado a toda la ciudad¡
Pese a todo lo que le ha hecho, Jose siente que esto es lo peor porque ha roto esa ilusión nueva que estaba naciendo en él. Otra vez Fernando le arrebata su presente. Llora de dolor, rabia y vergüenza. No sabe qué le va a decir a Sergio pero tampoco tiene tiempo porque éste se le tira encima a Fernando. Entre los dos comienza una fuerte pelea. Sergio no está acostumbrado a este tipo de cosas. Fernando en cambio es un chico más violento para el cual pelearse es algo más normal. No le da una oportunidad a Sergio. Le golpea y le golpea y no recibe nunca. Sergio está muy golpeado. Sangra. Paula disfruta la situación. Jose angustiado le suplica a su hermana que controle a su marido pero Paula se lo está pasando demasiado bien como para intervenir.
--¡déjalo, Fernando¡ ---suplica Jose angustiado.
Y pese a que le sangra la cara y casi no se tiende en pie, Sergio le exige a Jose que no se meta. Fernando sonríe con cara de salvaje y lo sigue golpeando una y otra vez. Desesperado Jose suplica ayuda a sus padres. Al ver que llega su padre, Paula se finge apenada. Le hace creer a su padre que fue ella misma quien lo hizo llamar porque Jose disfrutaba de la pelea.
--¡¡el camorrista de su amante de turno ha atacado a Mi marido por nada¡--dice Paula.
Jose se da cuenta que su padre una vez más ha tomado partido por Paula y no lo escucha. Pablo acaba con la pelea. Tiene claro que la culpa es de Sergio pese a que él es el único que está herido. Jose se quiere acercar a él pero su madre no le deja.
--no compliques las cosas --le advierte.
Ana sí quiere saber lo que ha pasado y Fernando dice:
--¡¡defendiendo el honor de Jose y la familia ¡¡ --mira a Sergio con desprecio-- ¡¡estaba dando un nuevo espectáculo con éste y seguro que iban a coger en el auto¡
Jose iba a abrir la boca pero su padre es más rápido. Pablo bofetea a Jose:
--¡¡no eres más que una maricona¡ ¡¡maldigo el día en el que naciste¡
Ana una vez más se pone del lado de su hijo. Su esposo se enoja. Ahora mira a Sergio. Poco le importa que no se aguante en pie:
--no se vuelva a acercar más a mi hijo ¡ya nos ha llenado demasiado de vergüenza¡ ¡¡como ya se lo habrá tirado bastante pues no te costara olvidarlo¡
--¡¡Pablo¡--Ana molesta.
--¡no digo nada que no sea verdad¡¡Éste no se da respectar… es un maricón que da asco¡
Jose se siente morir. No se atreve a mirar a Sergio que se va con dolor. Jose quiere entrar a la casa pero su padre la llama:
--¡¡si huye. Así arreglas tú las cosas¡
Jose se enfrenta a su padre:
--¡¡es que nada de lo que hago te gusta¡
--¡¡¿¿quieres que te felicite por ser tan maricón? –dice hiriente.
Ana riñe a su marido pero Pablo dice:
--¡¡yo no tengo la culpa que tu hijo sea un maricona¡
Pablo se va molesto, Ana va tras él. Fernando y Paula miran a Jose divertidos.
--totalmente de acuerdo con tu padre. Aunque yo no hubiera sido tan fino --Fernando a Jose con desprecio.
--mi amor, mi hermano es libre de coger con quien quiera --Paula con rin tintín.
Paula abraza a su marido y entra en la casa con él. A Jose le duele que su padre lo humille, el gusto que le ha dado a su hermana y cuñado que han disfrutado con la situación. Fernando lo miraba divertido pero en realidad está muy molesto. Paula se da cuenta:
--¿¿qué te pasa?¿¿es que sientes algo por mi hermano?
Fernando no está para reclamos. Golpea la pared con odio:
--¡¡fuiste tú la que te metiste en mi cama y me atrapaste con un embarazo para fastidiar a tu hermano que sabias era mi pareja¡¡¡¡yo te cumplí¡¡¡ahora déjame en paz¡
Aunque Paula le exige que no se vaya Fernando sale de la casa. Paula sabe que Fernando se va porque está molesto por lo de Jose y se muere de rabia.
--¡te odio¡¡¡te odio¡ --dice Paula decidida a destruir a su hermano.
Fernando siente un gran deseo de venganza. Se encuentra con Jose. Fernando salía y Jose entraba. Lo agarra del brazo con rabia:
--¡¡Mira voy a ser muy claro ¡si quieres coger será con quien yo quiera. No quiero que vuelvas a estar con ese imbécil¡
A Jose le gustaría que esos celos que ve en él fueran por amor y no porque lo ve como una propiedad.
--¡¡haré lo que se me pegue la gana¡ --con una furia herida.
Fernando le retuerce el brazo:
--¡¡tú eres mío y si te ves con ese tipo me llevaré a tus hijos y no los veras más¡
Jose lo mira con odio :
--¡no puedes hacer eso¡¡no son nada tuyo¡
Fernando sonríe pérfidamente y su mirada hiela la sangre de Jose.
--Sabes que conozco a un juez que te podría quitar la custodia a la de ya, no me obligues --dice con una sonrisa maquiavélica.
Luego lo estrecha entre sus brazos, se acerca para besarlo. Jose pese a todo se derrite, se estremece, ofrece sus labios. Satisfecho, al comprobar que sigue ejerciendo una influencia sobre Jose, Fernando se aparta de él sin besarlo dejándolo con las ganas:
--¡¡yo te daré todos los machos que quieras. Pero las cosas se harán a mi modo¡
Fernando se ríe de él y se va dejándolo muy molesto. A solas en su auto Fernando golpea el volante.
--¡¡maldito sea¡
Le ha dado mucha rabia, le ha dolido mucho ver a Jose besándose con otro.
--¡¡no puede sentir nada por otro¡
Aunque no lo quiere aceptar está herido y algo asustado. No quiere que Jose deje de quererle. No quiere llorar pero no puede evitar que se le escape las lágrimas.

Fernando se pone a averiguar. Sabiendo dónde Jose conoció a Sergio, se acerca a él y le muestra desde su móvil el vídeo en el que Jose está siendo penetrado por Raúl y Fernando. Fernando está dispuesto a que se descubra su homosexualidad con tal de tener a Jose dominado.
--¡si te acercas a él¡ ¡¡te mato¡
Además le dice que Jose ejerce la prostitución. Sergio no soporta lo que ve y escucha y cuando Jose lo llama lo insulta y le dice que no quiere saber nada de él.





Comienza un nuevo día, Jose quiere vivir un día tranquilo con sus hijos. No volverá al taller, no verá a Sergio.
--hola, cuñadito.
La voz de Fernando lo estremece.
--¿¿que haces aquí? --nervioso.
Fernando se acerca a la cuna de Fernandito:
--se nota que es mi hermano. Cada vez se parece más a mí --dice con orgullo.
Jose se pone muy nervioso. Le pregunta a qué juega, él le contesta que le gusta jugar con fuego. En realidad a los padres del joven no les sorprende que Fernando quiera estar con sus sobrinos y eso los acaba de convencer de lo buena gente que es. Jose no quiere caer en el juego de Fernando pero éste le deja claro que si no lo hace le mostrará al padre el video de ellos. Aunque se desprecia así mismo por eso, a Jose le excita la idea de que Fernando lo obligue a ser su amante. Fernando tiene otros planes. Se van por separado. Se encuentran en el auto de Fernando. A Jose le excita la presencia de Fernando. Él lo sabe y se muestra coqueto pero para tenerlo comiendo en la mano. Jose lo mira con cara de depravado:
--muchos te han tocado pero sólo yo te he dejado marca.
le obliga a que se haga un tatuaje en la nalga con su nombre: Fernando.
Jose lo hace aunque se muere de la pena. Confía que después le haga el amor. Fernando se excita viendo como Jose se deja marcar como si fuera una propiedad. Jose le deja claro que no volverá a hacer lo que él quiera, que no estará con otros hombres. Para sorpresa de Jose, Fernando dice:
--está bien pero no quiero que estés con ningún hombre o le enseñaré el video. Si necesitas sexo te lo doy yo.
--está bien.
Y Jose desea besarlo, desea hacer el amor con él. Jose lo desea:
--¡¡ahora te necesito¡
Fernando sonríe satisfecho. Se besan. Jose es feliz besando a Fernando. Se le ofrece:
--¡¡he roto con Sergio. Seré tu amante¡
Y Fernando le dice con ironía:
--¿¿y qué te hace pensar que yo quiero ser amante de una puta?¡¡estás demasiado usada, reina¡
Jose se ha quedado helado. Fernando sigue burlándose.
--¡querer ser el amante de tu cuñado y con tu hermana apunto de parir¡ ¡¡eres una basura de lo peor¡
Jose llora:
--¿¿es que no te cansas de humillarme?
Fernando se ríe:
--Me aburro sin ti.
Se va dejando a Jose retorciéndose del dolor. Fernando entra en su auto. Golpea el volante. Unas lágrimas deslizan por sus mejillas.
--¡te odio¡ ¡¡te odio¡ --dice mirándose al espejo.
El recuerdo del maltrato de su padre a su madre no deja de atormentarlo.






Semanas después. Jose es un padre feliz. Sus hijos crecen muy sanos. Le duele ver a su hermana “feliz” en brazos de Fernando. No sabe que no duermen juntos. Fernando se escapa siempre a la cuna de su hermano. Jose vibra y lo mira deseando que él le haga el amor y Fernando disfruta dejándolo con las ganas. Juntos frente a la cuna. Fernando le agarra la mano:
--te has portado muy bien. Te he estado vigilando. No has estado con nadie. Hoy yo te haré el amor.
--¿¡que te has creído que soy yo? --le reclama.
--Mi puta.
A Jose le duele que Fernando sea tan autoritario pero lo ama demasiado. Se va tras él. Hacen el amor en el apartamento de Raúl. Fernando lo ha echado de menos y quiere estar un rato con él pero a los dos les suena el celular ¡¡Paula está de parto¡ Fernando se viste el primero y no espera a Jose pese a que se lo pide.
--¡¡mira. ya te he dado lo que querías. Te has revolcado con el marido de tu hermana. Ahora déjame en paz¡
Fernando se muestra muy agresivo y a Jose le duele que no sea el mismo Fernando tierno con el que hacía el amor.




Cuando Fernando llega a la clínica ya ha nacido su hija. La pequeña Fernanda. Llora al verla y le promete a su princesita que ningún hombre la humillará. Luego va a buscar a su madre para que la conozca. Fernando ve a su hija a través de los cristales. Jose si toma en brazos a su sobrina y llora. La besa. Es la sobrina de su hijo. Siente algo muy especial por ella. Para humillarlo Paula dice:
--debes sentirte muy mal porque Fernando me cumplió y te abandonó a ti. Sé que Fernandito es algo de Fernando, no sé de donde lo has sacado pero al igual que se quedaste con Juliancito porque te acostaste con el padre estoy segura que ha pasado lo mismo con Fernandito. Eres patético ¿y sabes que es lo mejor? ¡yo me he acostado tanto con Fernando como con Julián para quitártelos¡ ¡¡yo te quité a tu marido, a Fernando¡ ¡¡me acosté con él para que me embarazada, para humillarte y yo convencí a Julián para que se largara¡ ¡también puedo buscarlo para que te quite a ese bastardo¡ ¡¡cuando me canse de Fernando lo haré¡
--deja el rencor atrás. Ya tienes a Fernando, déjame tranquilo con mis hijos –le suplica Jose.
--¡no vas a ser feliz¡
Ninguno de las dos se da cuenta que Pablo, el padre de ambos, lo ha escuchado todo. Entra y mira a Paula decepcionado. Agacha la cabeza al ver a su hijo Jose. Se da cuenta que ha sido injusto con él. Mira a Paula con rabia y dice:
--¡date por desheredada¡¡ ¡¡no quiereo saber nada de ti¡ ¡al fin de cuenta Jose resultó mejor que tú¡
Las palabras de Pablo impactan a los dos.




Al llegar a la casa que le quitó a Jose, Fernando se encuentra a su padre vistiéndose y a su madre golpeada y medio desnuda. Se pone como loco.
--la has violado?¡
--¡¡es mi esposa¡ ¡¡puedo hacer lo que quiera con ella.¡
Fernando se lanza contra su padre. Lo agarra del cuello. Su madre le suplica que lo deje pero es demasiado rencor el que siente. Muchos años de odio, de miedo. De vergüenza. Mata a su padre con sus propias manos. La madre llora conmocionada. Fernando siente que ha hecho lo que debía y cuando la policía se lo lleva solo dice:
--lo único que lamento es no haberlo hecho antes.
Y sonríe. Siente que es un miserable como su padre que le ha arruinado la vida. Piensa en Jose. Llora. Sólo espera que su hija no sufra lo mismo que su tío y su abuela.

Aprovechando que Jose está pendiente de la pequeña en el nido, Paula escapa del hospital. No está dispuesta a que su padre hable. Se mete en el auto de él y cuando lo ve yendo a buscar el auto le pasa por encima. El hombre muere en el acto. Paula mira hacia atrás para asegurarse que nadie la ha visto. Se estrella contra una columna. El impacto es grande porque iba a bastante velocidad.

Mientras Fernando es ingresado en prisión, Jose entierra a Pablo y Paula con pena. Ana se ha vuelto loca del dolor y tiene que ser internada. Jose acoge a su pequeña sobrina que se ha quedado sola como una más de sus hijos.

Amaya visita a su hijo en la cárcel.
--Debí hacerlo yo. Debí cuidarte yo.
Los dos lloran. Fernando está contento pese a todo. Él creía que con la casa su madre ya era libre y se siente mal por no haberla sabido cuidar. Ahora está contento porque ella ya es libre. A Amaya le duele que su hijo haya sacrificado su vida por ella. Con lágrimas en los ojos le dice:
--por culpa de esa bestia no pude hacer feliz a la única persona que me amó..
No le da detalles pero Amaya sabe de Jose por los vecinos y lo va a buscar. Jose se impresiona mucho al saber lo que ha pasado con Fernando. Amaya está dispuesta a devolverle la casa, el dinero pero al saber que todo era para rescatar a su madre de su padre, Jose siente que ha merecido la pena. La madre de Fernando le dice de los problemas emocionales de su hijo por culpa de los maltratos del padre.
--yo siento que tu eres el único que le puedes salvar. Se ha puesto en tratamiento para maltratadores. No quiere ser como su padre pero tú lo tienes que ayudar.

Días después, Fernando tiene en su celda las fotos de su hija y su hermano. Sabe que los 2 están con Jose y eso es lo que más le calma. Sabe que Jose cuidará bien de su hija. Tiene una visita, le dicen que su cuñado. Fernando no puede creerlo. Es un vis a vis.
--¿¿te has venido a burlar de mi?
Jose agarra las manos de Fernando.
--Soy tuyo, ¿recuerdas? Nada podrás hacer para alejarme de ti.
--no quiero tu compasión¡¡
Jose lo mira enamorado. Se ha humillado por él tantas veces y piensa seguir haciéndolo:
--ni mi amor?
--aún me amas, a pesar de todo? --sorprendido.
--si. Me voy a enfrentar a todos por ti. Te juro que no me importa si me lastimas.
Fernando lo abraza con angustia:
--necesito ser feliz. Ayúdame.
--te amo
--yo también, yo también –se atreve a decir a Fernando con desesperación
Los dos se funden en un fuerte abrazo. Jose quiere besarlo pero Fernando le pone la mano en medio.
--No necesito esto, vayamos poco a poco.
--tengo ganas de ti. --Jose suplicante de amor.
Fernando se muestra cariñoso, por primera vez ante Jose.
--aquí no. Me puedes venir a ver siempre que quieras como mi cuñado, no quiero que te ates a mi.
Jose lo abraza con desesperación.
--¡pero yo quiero estar contigo¡
Fernando acaricia a Jose. Lo besa en la frente.
--Si me amas te conformarás con estar conmigo, dándome tu amistad. No tu cuerpo.
Fernando quiere que así Jose le demuestre que lo ama y quiere sentir que merece ese amor.
--No te voy a engañar, aquí podré tener sexo por eso eres libre. Puedes estar con quien quiera. Trata de buscar a otro que te haga feliz pero me puedes venir a ver siempre que quieras.
Y Jose le hace un juramente por la vida de sus hijos:
--jamás estaré con otro hombre.
Y aunque Fernando no quería besarlo, unen sus labios entre lágrimas. Pone sus manos en las mejillas de Jose:
--estás seguro que quieres esto? yo no te ofrezco nada. Parece que serán más de lo que ahora tengo los años que pasaré aquí.
--Pagaré lo que sea por un buen abogado y en todo caso, te esperare.
Fernando sabe que es egoísta por su parte pero siente que no podrá suportar todos esos años en la cárcel sin Jose
--a mi manera siempre te quise, perdóname—suplica Fernando.
Jose lo siente una víctima de su padre y lo único que quiere es ayudarlo a que sea feliz. Lo mira a los ojos y no dice nada. Sólo lo besa. No les importan los años de cárcel, la separación. Saber de los niños y el calor de Jose ayudan a Fernando en su encierro. Jose es feliz viendo cómo crecen sus hijos, la hija de Fernando. Esperando con ansias ese momento de volver a verlo. Sí, es en la cárcel pero cuando el uno está abrazado al otro son libres.

FIN.





martes, 5 de julio de 2011

capitulo 26




El día de la boda se acerca peligrosamente. Jose quisiera que pasara un milagro y algo lo interrumpiera. Él no se atreve pero no pierde la esperanza. Es ya la noche antes. Jose duerme tranquilamente. Fernando se ha quedado con una copia de las llaves de Paula. Entra sigilosamente. Mira a Jose, que duerme, con cara de depravado. Se desnuda y se mete en la cama. Cuando Jose se despierta ya lo tiene desnudo y encima. Se asusta porque no sabe lo que pasa. Fernando le tapa las manos con la boca. Le sonríe con cara de depravado.
--es que no encontré otra puta para celebrar mi noche de soltero --dice con cinismo.
Jose está molesto y trata de forcejear con él pero Fernando lo ha hecho prisionero de su cuerpo. Lascivamente dice:
--bueno en realidad todos me cobraban mucho y porque tú eres la reina de las putas.
Fernando lo besa. Jose trata de resistir a sus sentimientos pero se rinde al calor de él. Se deja dominar por él. Se siente feliz entre sus brazos. Siente que se aman. No lo siente un polvo más. Fernando tampoco lo reconocería pero en esos momentos siente algo especial por Jose. Fernando explota de placer y cae jadeando al lado de él. Jose está feliz. Quisiera abrazarlo pero Fernando salta de la cama. Se empieza a vestir con prisa. Cuando los dos aún está gimiendo, Fernando no puede evitar caer en la tentación de humillarlo.
--¡¡Eres una puta de lo peor¡
Jose cae del cielo al infierno. Se tapa su desnudez con vergüenza. Se da cuenta de lo que pensaría su familia si lo viera en ese momento. Se siente sucio. Se siente un miserable y Fernando, como siempre, lo ayuda para que se sienta peor.
--Se que me amas --le dice con sarcasmo-- y que soy irresistible pero ¿¿¡como has dejado que te eche un polvo?¡ ¡¡mañana me caso con tu hermana que me va a dar una hija ¡¡no tienes escrúpulos, Jose¡
Fernando sonríe con burla y a Jose lo mata.
--te odio --llora Jose.
Fernando sonríe y divertido dice:
--pues menos mal.
Y se va contento vistiéndose por el camino. Jose se abraza llorando a la almohada.
--¡¡miserable¡ ¡¡es un miserable.¡
Pero vibra acariciando esas sábanas que huelen a él.
--¡¡Soy como él, soy como él¡
Se desprecia así mismo por caer en el juego de Fernando que sólo busca hacerle el amor para humillarlo. Fernando entra en su auto. Se mira al espejo con odio. Golpea el volante con rabia. Se refugia en su madre. No le cuenta lo que le pasa pero llora sobre su regazo como cuando era chico y temía a su padre. Jose no puede dormir en toda la noche. Se levanta con muy mala cara.


Y llego el momento. Jose nunca soñó con casarse con Fernando. Ya lo sentía su marido. Ser el padre de su hermano era una unión demasiado fuerte. Arregla a los niños para ir a la boda. Se pone un traje pero apenas se arregla. Su madre le reprueba su comportamiento que tacha de digno de un tipo amargado. Jose esta más solo que nunca. Si no fuera por sus hijos no encontraría un motivo para vivir. Paula se siente una reina. Su padre llora. Ella está feliz. Su triunfo es casarse con el hombre de su hermano y no le importa nada más. Jose llega con sus hijos. Dolido, pero digno. Ahí está Fernando con su testigo, Raúl. Jose no podía sentirse más humillado. Fernando está elegante. Guapo y Jose se muere de amor pero le duele la mirada de burla de él. Le duele saber que se ha reído de él, de Paula y de sus padres. Tampoco le gusta la mirada obscena de los dos amigos hacia él. Quiere ignorarlos pero siente como lo miran y eso lo estremece. Las miradas de Raúl lo incomodan, las de Fernando lo queman. Se sienta en la iglesia con sus hijos. Mira de reojo a Fernando con amor y odio y Fernando le responde divertido. A Jose le tiembla todo al ver que Fernando se le acerca. Le gustaría que le pidiera perdón y le pidiera que se fugara con él. Con su mirada y voz sensual, con su habitual tono de burla dice:
--me encanta la despedida de soltero que me hiciste. Le voy a dar mi tarjeta a algunos amigos míos. Te recomendaré bien. Eres muy bueno en tu trabajo.
Jose no quiere mostrarse alterado por sus hijos que están con él. Jose fuerza una sonrisa y dice con ironía.
--gracias, eres muy amable.
Así no es divertido. Y Fernando no quiere irse hasta que haga enojar a Jose.
--Sé que eres una puta maricona y a mi me encanta coger contigo pero --se hace la víctima-- lo de ayer no puede volver a pasar ¡¡voy a ser tu cuñado.¡ te di el gusto por última vez pero ahora cada vez que le quieras abrir el culo a alguien --mira hacia Raúl-- lo buscas a él que encantado te dará lo que buscas pero de mi te olvidas.
Jose explota:
--¡¡basura, miserable¡
Fernando sonríe satisfecho. Es lo que quería y a Jose le da rabia que siempre se salga con la suya. Fernando vuelve con Raúl y los dos amigos chocan sus manos divertidos. Al ver a su padre alterado Juliancito llora y Fernandito después. Ana llega corriendo y se molesta con su hijo.
--que pasa? ¡¡compórtate¡
Jose se muere de rabia mientras que Fernando sonríe con cara de bueno.


Y llega la radiante novia de brazo del orgulloso padre. Jose está ya al lado de Fernando. Dolido, enamorado. Mira a su hermana con tristeza y envidia. Tiene la boda que Jose jamás tendrá, el padre que a él lo rechaza, el apellido para su hija. Jose se siente hundido pero detrás tiene a sus dos soles con su madre y por sus hijos aguanta el chaparrón. Siente que un puñal ardiente le atraviesa el alma al ver como el hombre que le ha arruinado la vida y su única hermana se intercambian promesas de amor. Jose mira de reojo a su amado y éste le sonríe con disimulo. Raúl mira a Jose con ojos de sátiro y Jose se siente mal y humillado recordando cómo se dejó arrastrar por Fernando para acostarse con esos dos amigos que ahora tiene juntos. Y el sacerdote da lo que para Jose es una sentencia de muerte:
--Y lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre. Puedes besar a la novia.
Fernando y Paula se besan contentos porque están lastimando a Jose. Jose aplaude con todos pero roto por dentro. Raúl le roza la mano y susurra burlón:
--no llores. Me tienes a mi.
Jose se lo saca de encima. Paula abraza a su hermano con un falso cariño de hermana y le susurra al oído:
--gracias por entender que Fernando me ama a mi.
Paula se hace la buena onda pero lo que quiere es lastimar a su hermano y lo logra. Jose quiere ir con sus hijos pero Fernando lo devora con los ojos y con burla le dice:
--cuñadito ¿¿no me vas a felicitar?
Ana fulmina a su hijo con la mirada. Fernando besa a Jose en la mejilla. Jose se derrite en sus brazos:
--siento no poder seguir dándote placer --le susurra-- pero tu hermana si merece que le sea fiel.
Jose tiene ganas de llorar. Con la excusa de los niños, Jose va hacia su casa.
--Raúl, te acompaña --dice Fernando.
Jose se niega pero Ana lo obliga a que acepte almenos hasta el auto. Fernando los acompaña aunque Jose no quiere él agarra el carrito de los bebes.
--tengo mis derechos --dice con burla.
Montan a los niños en un taxi. Luego Fernando agarra del brazo a Jose y le dice con burla:
--quiero que en la noche de mi boda te acuerdes de mi acostándote con él.
Raúl mira a Jose con cara de depravado y Jose siente asco.
--ni loco¡¡
Jose quiere entrar en el auto pero Fernando le agarra del brazo y muy violento le dice:
--le mostraré a tu padre nuestro video¡¡
--hazlo¡¡¡
Se miran desafiantes. Jose se mete en el taxi mientras un furioso Fernando le dice:
--¡¡no juegues conmigo¡¡ ¡vas a perder¡
A Raúl le da rabia haberse quedado con las ganas.
--¡¡le tienes que hacer la vida imposible a esa guarra¡
Fernando le dice que lo hará pero sonríe satisfecho mirando como el taxi se aleja. Le ha gustado que Jose dijera no.


A solas en su casa Jose se siente más tranquilo solo con sus hijos pero tiene una gran herida en su alma. Fernando es ya un hombre prohibido para él. Es ya muy tarde cuando llega la familia. Fernando y Paula tienen reservada una elegante suite para su noche de bodas. A Jose le atormentan los celos. Sufre a imaginarse a su hermana en brazos de su amado. El recién estrenado matrimonio va a la casa al día siguiente para despedirse antes de irse de luna de miel. Paula presume de marido ante Jose que está en la habitación de sus hijos dándole el biberón a los pequeños. Fernando lo mira con cara de depravado. A Paula no le gusta que Fernando sienta cosas por Jose. Se lo lleva pero Fernando aprovecha la confusión de la despedida, la bajada del equipaje para volver a la habitación. A Jose le sorprende. No le gusta que lo mire con cara de pervertido mientras está con sus hijos. No le perdona que quiera ensuciar un momento tan íntimo.
--¡¡vete¡ ¡¡no me mires¡
Con lujuria dice:
--antes no sólo me dejabas mirarte sino que te encantaba. Te encantaba que a todas horas te hiciera el amor..
Jose es un volcán a punto de entrar en erupción. Ya está cansado de salir lastimado.
--¡¡eras mi marido¡
Fernando no deja de mirarlo. Se lleva las manos al paquete y se acaricia para que Jose vea que su arma está bien gorda. Jose se escandaliza cuando su cuñado hace intenciones de sacársela.
--Yo también necesito descargar. ¿no quieres mamar de mi?
Su tono lo asquea pero a la vez le gusta pero no quiere que lo siga humillando. Deja a su hijo en la cuna. Fernando ya tiene los jeans en las rodillas. Se acaricia el slip con gestos obscenos y Jose lo amenaza con unas tijeras:
--¡¡sácala ahora¡ -dice con rabia.
Fernando se sube los pantalones y riendo dice:
--pues tú te lo pierdes.
Jose lo odia y lo desea. Y siente asco de él mismo por permitir que sus hijos vivan esas situaciones. Se siente más tranquilo ahora que Fernando y Paula se van por 3 semanas a Italia de luna de miel pero a la vez le duele no ser él quien esté con Fernando.





Con la tranquilidad que le da saber que Fernando está lejos, Jose quiere comenzar una nueva vida. Una amiga de su madre tiene en lo que es el garaje de su casa un taller de costura. Jose quiere aprender a coser para trabajar con ella. Acuerdan que irá un par de horas por la mañana mientras que doña Ana se queda en la casa ejerciendo de feliz abuela. Le sorprende ver que hay un chico en el taller.
--será gay? --se dice-- ¡ojalá¡
Es la dueña la que se lo presenta. Se llama Sergio. Con dos hijos y herido de muerte es en lo que menos pensaba era en fijarse en un chico pero le gusta Sergio. Para su sorpresa es Sergio quien lo enseña a coser. Pasan las dos horas juntos. Descubre en el a un chico simpatiquísimo. Jose tiene algunas curiosidades. Se pregunta si es gay y si sabe que tiene hijos y que él sí es gay. La primera pregunta queda sin respuesta. Sobre la segunda es el propio Sergio el que saca el tema. Dice que lo admira, que es muy valiente por adoptar a dos hijos siendo tan joven.
--bueno como al ser gay no iba a poder tenerlos… --Jose.
Jose le gustaría que Sergio le dijera algo pero no. No dice nada más. Jose siente que por primera vez en mucho tiempo un hombre lo trata con respecto. Es un chico muy dulce pero también vive un momento excitante. Mientras Jose está en la maquina por un instante lo ve como se rasca la barriga por debajo de la camiseta y se le ven los pelos de bajo el ombligo. Le gusta. Jose lamenta que sólo se pueda quedar un rato pero sus hijos son su prioridad. ¡¡lo más importante es que se verán al día siguiente¡ Jose sonríe contento por primera vez en mucho tiempo. Su madre se alegra.
--sabia que trabajar te haría bien.
Y Jose se siente como un adolescente. Mientras se ocupa de sus hijos no deja de pensar en Sergio. No había pensando en la posibilidad de tener un hombre en su vida pero si le gustaría que sus hijos tuvieran una familia y a él le gustaría tener la compañía de un hombre que le dé amor y protección pero es consciente que se está precipitando. ¿¿porque Sergio iba a cargar con 2 hijos que no son suyos? Sabe que no debe hacerse ilusiones con Sergio y no quiere pensar en él. Jose sale a dar a una vuelta con los bebés y Sergio está ahí. Se acerca a Jose.
--¿te puedo acompañar?
A Sergio le abruma un poco tanto niño pero se siente a gusto con ellos. Juliancito lo mira con curiosidad. No quiere estar en el carrito con Fernandito y Sergio lo toma en brazos. Jose siente una ternura especial. Le gustaría tener un futuro al lado de Sergio. Posiblemente en el pasado ya se hubieran acostado juntos pero Jose no busca un revolcón y también sabe que Sergio no va a querer cargar con una familia casi numerosa. Aunque tiene miedo de salir herido Jose esta muy contento con Sergio. Es el primer chico que no le habla de sexo.


Días después. Jose parece que ha sacado a Fernando de su vida. Sergio le habla claro.
--sabes que soy gay, ¿verdad?
--supongo…
Sergio lo va acariciando. Lo besa.
--¿y mis hijos? Yo busco un rollo.
Sergio la mira con cara de bueno:
--dame una oportunidad.
Jose lo acaricia:
--pero vamos poco a poco.
Sergio sonríe con ternura y se vuelven a besar. En la tarde, Jose deja a sus hijos con su madre y va con Sergio. Pasean como pareja muy acaramelados y se besan siempre que quieren. Los dos están muy contentos juntos.

martes, 28 de junio de 2011

capitulo 25







Jose llega a la casa, luego de su apasionado y humillante encuentro en el departamento de Raúl, de sus padres con ganas de ver a sus hijos. Se queda helado al ver a Fernando con Paula. Al verlo llegar se besan y Fernado le dice:
--¡te amo. Nunca he amado a nadie más, no tengo ojos sino para ti¡
Y Jose sólo piensa:
--¡¡que desgraciado¡
Se quiere ir sin ser visto pero Fernando lo llama. Con cinismo le dice:
--cuñado ¡¡que alegría¡
Y le da un beso en la mejilla:
--ya sé que vas a ser testigo en la boda ¡¡que ilusión me hace¡
Jose mira a ese hombre con amor y odio. Desea esos labios pero pese a todo lo que han vivido le cuesta creer que sea tan descarado. Está deshecho. Desea esos labios ardientemente.
--¿¿te ocurre algo? --pregunta Paula.
Jose les quiere contestar mal pero su madre lo observa. Con la mirada le dice: ojo con lo que haces. Se quiere retirar pero ellos le piden que los ayude a elegir las invitaciones de la boda. Jose les dice que tiene que atender a sus hijos. Antes de girarse por el pasillo los ve besándose y eso lo hace llorar. Se encierra en su cuarto. LLora sobre la cama. No sabe bien si son celos o es por salvar a su hermana de las garras de Fernando pero no está dispuesto a soportar que se casen. Jose siente que Fernando es el peor hombre del planeta y por sus hijos jura que jamás volverá a caer en su juego.


(los padres de Jose)

Jose se refugia en sus hijos. Aprovechando que va al lavabo Fernando se asoma al cuarto. Los pequeños duermen. Jose siente la presencia de Fernando que se coloca detrás de él. Jose se estremece sólo con su aroma. Fernando sonríe orgulloso. Su aliento lo embriaga. No lo mira pero vibra con intensidad.
--que bellos nuestros hijos. --susurra con sensualidad.
Jose se gira molesto pero queda hechizado por el embrujo de la mirada de él. Sus labios lo llaman. Fernando sonríe con orgullo. Lo acaricia:
--¡Eres mío¡ ¡¡solo mío¡
Jose siente escalofríos de pasión. Fernando roza sus labios. Goza sintiéndolo temblar de placer. Goza teniéndolo a sus pies. Se aparta de Jose que se muere por un beso. Jose abre los ojos frustrado. Fernando se le ríe.
--eres patético.
Jose se siente humillado. Y lo que más rabia es que se lo permite. Que Jose le permite que Fernando se burle de él con sus hijos delante y con su embarazada hermana a pocos metros.
--¡¡eres despreciable¡ --Jose llorando de rabia.
Fernando lo mira con cara de degenerado. Lo agarra de las nalgas. Lo estrecha entre sus brazos. Jose quiere rechazarlo pero el fuego lo consume. Fernando lo besa apasionadamente y Jose le responde. Luego Fernando lo aparta de él dejándolo sofocado y con las ganas.
--¿¿quien es despreciable ahora?
Fernando se le ríe. Jose se maldice así mismo por no poder quemar ese loco deseo-amor que siente hacia el prometido de su hermana y que lo destruye. Fernando se gira. Le guiña el ojo y Jose no cae en sus brazos porque Fernando no quiere, porque quiere humillarlo. Con ironía Fernando le dice:
--no quieres ver el departamento que nos ha regalado tu padre y a Paula y a mi?
Jose lo mira dolido y decepcionado:
--¡¡basura¡
Fernando le guiña el ojo. Se acerca y le pellizca el trasero:
--tu único encanto es que eres una puta y el de tu hermana es que me lleva directo al dinero de tu padre. ¡¡qué bien que me lo hacen pasar estas hermanitas¡
--y seguro que estará a tu nombre--le reclama Jose dolido.
Fernando le guiña el ojo.
--aún no. Sólo está a nombre de los dos.--dice con ironía.
--¡eres un cínico¡
--claro tú querías que yo viviera en vuestra casa para haceros el amor a las dos putitas.
Jose lo mira dolido:
--no te vas a salir con la tuya. Alguien tiene que pararte los pies.
--Y ese no vas a ser tu.
Fernando sonríe burlón. Le guiña el ojo y se va muy coqueto. Jose se queda deshecho. Aunque se dice así mismo que no debe seguirlo no puede dejar de hacerlo. Algo lo arrastra hacia él y lo ve besándose apasionadamente con su hermana. Jose corre a su cama llorando.
--¡¡tonto, tonto, tonto¡
No deja de maldecirse una y otra vez. No entiende porque permite que Fernando lo humille una vez y otra. Juliancito llora. Jose seca sus lágrimas y va a atender a su hijo. Sus pequeños son su paraíso. Siente que es lo único bueno que ha sabido hacer, lo único bueno que ha obtenido de una vida llena de errores.


Los preparativos de la boda se hacen con rapidez ya que el embarazo de la novia se empieza a notar. A Jose le duele ver a su hermana preparando su boda. A su madre feliz y Jose no se atreve a decir la verdad. Por una parte piensa que le gustaría estar del lado de su hermana y ser él quien se casara pero luego recordando todo lo que ha vivido con Fernando sabe que arruinará la vida de su hermana como ha hecho con la suya. Jose no puede creerse que Fernando vaya a ser un miembro de la familia pero porque se convierte en su cuñado. Tiene que tragarse su dolor. Fernando siempre que puede le advierte que si no hay boda él hará llegar el video que tiene de ellos a su padre. Por otro lado ni Paula ni Ana permiten que Jose hable mal de Fernando a quien toda la familia tiene en un muy buen concepto. Jose queda como un gay amargado a quien nadie ha querido. Se muere de dolor y celos cada vez que ve al futuro matrimonio juntos. Siempre se hacen mimitos y se besan. Fernando mira a Jose con cara de depravado. Le encanta hacerlo rabiar. Sabe que le molesta verlo con su hermana y por eso se muestra con Paula lo cariñoso que no fue con Jose y eso a Jose lo mata. Se muere de dolor. No soporta la mira de burla de Fernando, el tono irónico con el que lo llama cuñadito. A Paula le encanta molestar a su hermano, le muestra la ecografía de su hija:
--¡¡mi Fer esta feliz porque va a ser papa por primera vez¡ --dice.
Jose siente algo extraño al ver esa ecografia: ¡¡es la hija de su amado.¡ No puede evitar sentir algo muy especial por ese bebe. La sangre de Fernando y de él están unidas para siempre en su sobrina. Todas las noches llora y se pregunta: ¿¿porque ha tenido que pasar esto?

En esos días Jose cumple años. Deja claro que no quiere fiesta y es que lo que menos quiere es un motivo de reunión con Fernando como flamante miembro de su familia. A Ana le duele mucho que su hijo se aisle de la familia pero respecta la decisión de su hijo. Le regala ropa para sus hijos. Fernando llega en el momento que abría los paquetes.
--tan inoportuno como siempre --piensa Jose.
Le duele que Fernando no recordara esa fecha. Lo felicita con un abrazo y al oído le susurra:
--Tu regalo soy yo, esta noche te lo doy.
Jose queda paralizado por el deseo. Luego Fernando le hace mimitos a Paula y Jose se muere del dolor.

En la noche, Fernando entra en la propiedad por el jardín y comienza a tirar piedritas hacia la ventana de Jose. Éste no da crédito a lo que ve. Fernando con su sonrisa más seductora seguro que el joven va a caer en sus brazos pero Jose logra resistir.
--¡¡baja, tengo tu regalo y no me iré hasta que te lo dé¡ --dice muy sensual.
Jose se siente muy orgulloso de sí mismo. Por primera vez no sólo lo rechaza sino que le tira encima un cubo de agua helada. Luego se encierra en su cuarto relajado. Fernando se va mojado y furioso.
--¡¡esta me las paga¡ ¡¡ninguna puta me deja con las ganas¡ --dice echando fuego por las orejas.

Fernando conoce los movimientos de la casa y logra robarle las llaves a Paula. Entra sigilosamente en la casa en un momento en el que Jose está solo con sus hijos. Jose oye que alguien se ducha y se sorprende porque sabe que está solo. Va al baño y ahí está Fernando mojado y desnudo. Su musculoso cuerpo brilla. El agua desliza por ese cuerpazo. Jose lo mira con amor y deseo. Fernando le guiña el ojo y Jose se derrite. Muy sensual Fernando le dice:
--¿no me esperabas no? Es que yo siempre doy mis regalos.
Jose esta hechizado. Quiere huir pero el deseo lo inmoviliza. Es una marioneta en sus brazos. Fernando lo agarra como quiere, lo desnuda. Lo besa. Lo penetra. Jose se aferra a él:
--¡¡te amo.¡¡¡¡te amo¡ ¡¡no me merezco que me hagas esto¡
Jose quisiera que ese momento no acabara nunca. Fernando lo sabe y aunque es un sacrificio para él se aparta. Armado y jadeando le dice:
--sabes, ahora soy yo el que no quiere estar con una puta como tú.
Aunque está sofocado disfruta con esta nueva humillación. Se viste a toda prisa. Le cuesta mucho guardar su dura lanza. Jose no puede creer que Fernando le haga esto. Le suplica con la mirada que no lo deje. Fernando le hace un saludo con la mano burlón. Se va muy alterado en busca de un macho que lo calme. Jose cae en la bañera llorando amargamente.